La elección correcta de los envases para productos químicos garantiza la protección del contenido, la salud de las personas y la preservación del medio ambiente, además de prevenir incidentes como fugas o explosiones.
Estos envases para el área química deben cumplir con requisitos específicos de seguridad, como la resistencia a la corrosión y la capacidad de soportar cambios de presión, lo que los convierte en una pieza clave dentro del proceso logístico en la industria química.
La seguridad en los envases para productos químicos
La seguridad es la prioridad número uno cuando se trabaja con productos químicos. Y un envase inadecuado puede provocar fugas, explosiones o reacciones químicas que ponen en riesgo la salud de las personas y el medio ambiente.
a. Materiales resistentes
La elección del material dependerá de las propiedades de la sustancia que se va a almacenar.
Por ejemplo, los plásticos como el polietileno de alta densidad (HDPE) son adecuados para ácidos y soluciones corrosivas, mientras que el acero inoxidable se prefiere para productos químicos que requieren una barrera contra la oxidación.
b. Sistemas de cierre y protección
Estos sistemas evitan que se escape el contenido, mientras que las válvulas de alivio de presión protegen el envase de posibles explosiones causadas por la acumulación de gases.
Además, las etiquetas de productos químicos ayudan a identificar rápidamente el contenido y las precauciones necesarias para su manejo.
Normativas para envases de productos químicos
Una de las normativas más reconocidas a nivel internacional es el Sistema Globalmente Armonizado de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos (GHS, por sus siglas en inglés).
Este sistema establece criterios claros para los etiquetados, envasados y transportes para productos químicos peligrosos, asegurando la uniformidad en todo el mundo.
Además, organizaciones como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional de Normalización (ISO) proporcionan lineamientos que deben seguirse para el manejo seguro de estos productos.
A nivel nacional, cada país tiene sus propias regulaciones. Por ejemplo, en la Unión Europea, el Reglamento (CE) n.º 1272/2008 (CLP) establece normas para la clasificación, etiquetado y envasado de productos químicos peligrosos.
Opciones de envases para productos químicos en el mercado
1. Contenedores pequeños y bidones
Para pequeñas cantidades, los envases más comunes son las botellas de plástico, vidrio y los bidones de hasta 20 litros.
Estos envases son fáciles de manejar y suelen tener cierres herméticos para evitar derrames. Además, algunos están equipados con mecanismos de seguridad para prevenir la apertura accidental.
2. Barriles y tanques industriales
Cuando se trata de grandes volúmenes, los barriles de acero y los tanques de plástico reforzado son las opciones más populares.
Están diseñados para resistir la presión y la corrosión, asegurando el transporte seguro de sustancias líquidas y gaseosas.
3. Envases especializados
También existen envases diseñados para sustancias específicas, como los cilindros para gases comprimidos o los contenedores de polietileno fluorinado para elementos altamente corrosivos.
Estos envases deben cumplir con normativas adicionales debido a las características particulares de los productos que contienen.
La selección adecuada de envases minimiza riesgos y asegura el cumplimiento de las regulaciones establecidas, protegiendo tanto a las personas como al medio ambiente.
Por ello, es que en Liplata ofrecemos servicios integrales de transporte y bodega de almacenamiento de sustancias químicas.
Nos aseguramos de que tus insumos lleguen a su destino de forma segura y cumpliendo con todas las normativas vigentes, gracias a nuestras instalaciones especializadas y un equipo comprometido con el cuidado de tus envases para productos químicos.
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